Para los actores y actrices del Grupo de Teatro del IDEJO
El actor empluma el ala
y levanta roja la mirada,
vela desplegada,
con la garganta en la boca,
el verbo en los dientes,
y la palabra impaciente.
La lengua trémula
desploma el telón
La luna de marfil
se prende y se apaga
El aire se pone añil
La música se encuadra
Ellas y ellos
suben, vuelan, siembran
sus briosos corazones
con gruesa llovizna
en la quieta tierra
de mi alma en grietas.
Suena un acordeón
explotan los aplausos.
Se me detona el corazón
En mi butaca,
de las tablas y de mí
Nace potente
una hiedra color rubí
que trepa y sube
fuerte
resucitando
hasta a la muerte